Una palabra tuya
Director: Ángeles González-Sinde. Guión: Ángeles González-Sinde, sobre la novela de Elvira Lindo. Intérpretes: Malena Alterio, Esperanza Pedreño, Antonio De La Torre, María Alfonsa Rosso, Luis Bermejo, Marilyn Torres. Duración: 98 m. Año: 2008. Nacionalidad: España.


Después de su magnífica ópera prima "La suerte dormida" (2003), Ángeles González Sinde vuelve a contar otra historia sencilla, de gente normal, en este caso más centrada en los sentimientos que en lo social, en la soledad de los personajes, en la forma que tienen de enfrentarse a esa situación. La historia convence sobradamente y en todo momento, combinando momentos de humor agradable con otros más dramáticos a medida que la película avanza hacia situaciones más duras o complicadas. Quizá el sueño recurrente de la protagonista pueda hacerse un pelín repetitivo, pero... pecata minuta. El primer papel principal de Malena Alterio acaba con saldo positivo y el de Antonio de la Torre está francamente bien perfilado, mientras que el de Esperanza Pedreño, siendo acertado, puede acabar encasillando a la actriz por su parecido con el del programa de televisión "Camera Café".
Cinelandia.
La directora de la Academia Ángeles González-Sinde se confirma con su segundo largometraje como el "alter ego" femenino de Fernando León de Aranoa en cuanto a compartir un mismo tipo de cine, un género social y de sentimientos donde lo importante son los personajes por encima de la historia, y con grandes resultados en ambos casos. Sin llegar al nivel de la excelente "La suerte dormida" (2003), trata con sensibilidad y sentido del humor asuntos emocionales como la amistad, la soledad, la desconfianza y el amor de la mano de dos amigas que trabajan de barrenderas en Madrid; y si digo que no alcanza más vuelo es porque utiliza la estructura clásica del melodrama de "primero reímos y luego lloramos", echándose en falta más equilibrio, y porque la segunda parte más dramática se resiente en el conjunto de la historia. Muy buen trabajo actoral de todo el reparto, a pesar de que resulta inevitable ver a Esperanza Pedreño como la "Cañizares" de la televisiva "Camera Café" (divertidísima serie, por cierto) por mor de su personaje, algo que resulta cuanto menos cuestionable. Posiblemente en el año que menos se hable de la calidad de las producciones españolas, sin polémicas y sin hacer ruido a mí me parece que está siendo hasta el momento un buen ejercicio y con variedad. Que siga la racha...

Álex.