Reina de corazones (Dronningen)
Dirección: May el-Toukhy. Guión: Maren Louise Käehne y May el-Toukhy. Intérpretes: Trine Dyrholm, Gustav Lindh, Magnus Krepper, Liv Esmår Dannemann, Silja Esmår Dannemann, Stine Gyldenkerne, Preben Kristensen, Frederikke Dahl Hansen, Ella Solgaard, Carla Philip Røder, Peter Khouri, Mads Knarreborg, Marie Dalsgaard, Elias Budde Christensen, Noel Bouhon Kiertzner. Duración: 127 m. Año: 2019. Producción: Dinamarca y Suecia.


Interesante drama personal que pone sobre la mesa un tema polémico y de incorrección política: una esposa (además, abogada defensora de menores) acaba seduciendo al joven hijo biológico de su pareja. La situación se enreda hasta el punto que la mujer hace todo lo posible por aparecer como inocente ante su marido, echando la culpa de todo al propio chaval y llevando a la dolorosa duda al padre. Un filme sobrio pero que se acaba caldeando con el paso del metraje más allá de lo esperable en una cinta nórdica y, en cualquier caso, un provocador objeto de debate.
Cinelandia.
Otra cosa no, pero valiente es un rato la directora May el-Toukhy abordando un tema tan espinoso como las relaciones sexuales y afectivas entre adulto y menor de edad dentro de un entorno familiar, se puede decir que bordeando el incesto, y máxime cuando el primero es del género femenino y llega al extremo de hacer extensiva la manipulación emocional ejercida sobre el segundo al resto de la familia con tal de mantener el equilibrio que ella misma ha puesto en riesgo. Lo que no tengo tan claro es que haya salido airosa con su intención de no juzgar al personaje (enorme Trine Dyrholm), más conseguida en el largo preámbulo de su presentación, donde podemos intuir que tras su aparente vida perfecta no hay más que un vacío existencial que se cree capaz de llenar con la aparición de un hijastro rebelde (inexpresivo Gustav Lindh) que le despierta emociones ya olvidadas, que en una parte final tan valiosa por las diferentes lecturas que deja abiertas como previsible en la tragedia. Esto, unido a una asepsia narrativa general, minora el resultado de esta atrevida propuesta (las escenas de sexo sorprenden por su explicitud) para los tiempos de nuevas conductas y moralidades que estamos viviendo, sin duda su mayor virtud...

Álex.