Nader y Simin, una separación (Jodaeiye Nader az Simin)
Director: Asghar Farhadi. Guión: Asghar Farhadi.  Intérpretes: Peyman Moaadi, Leila Hatami, Sareh Bayat, Sarina Farhadi, Kimia Hosseini, Shahab Hosseini, Babak Karimi, Ali-Asghar Shahbazi, Shirin Yazdanbakhsh. Duración: 123 m. Año: 2011. Producción: Irán.


Lo que la administración de la justicia puede llegar a generar de injusticia en un país como Irán, con unas normas tan tradicionales y estrictas, es de lo que habla Farhadi en esta película. El punto de partida es la separación de un matrimonio (con soterrada crítica a la cerrazón social del país), que provoca una serie de cambios familiares, que, a su vez, genera una inestabilidad en las relaciones entre los miembros, que, a su vez, provoca consecuencias mayores y dramáticas. Lo que podría resolverse de una forma amistosa, debido al burocrático sistema judicial y al rígido código moral, se complica ante los atónitos ojos del expectador, que asiste, eso sí, a una magnífica interpretación de prácticamente todo el reparto.
Cinelandia.
Ahora no cabe duda que la acaparación de premios de esta cinta iraní en la última Berlinale es merecida, estamos ante un drama de carácter doméstico en torno a la separación de un matrimonio que versa sobre la influencia que tendrá en todos los miembros de la familia, revestido de una sobriedad impecable, conciso en sus diálogos, perfectamente interpretado y que, por otro lado, sirve de ejemplo de la situación social actual en un país como Irán, regido por el fundamentalismo islámico y en el que el papel de la mujer es poco menos que de pura comparsa (si bien la denuncia es más bien tibia y leve, lo cual no es de extrañar viendo cómo se las gasta el régimen de Ahmadineyad a la hora de encarcelar a directores de cine). Si acaso un alargamiento innecesario de la trama a la hora del desenlace le puede restar puntos a esta notable película de una filmografía tan apreciada en los festivales como es la iraní.

Álex.