Enemigos públicos (Public Enemies) Director: Michael Mann. Guión: Ronan Bennett, Michael Mann y Ann Biderman. Intérpretes: Johnny Depp, Christian Bale, Channing Tatum, Marion Cotillard, Stephen Dorff, James Russo, David Wenham, Christian Stolte, Jason Clarke, Branka Katic, Billy Crudup, Wesley Walker. Duración: 140 m. Año: 2009. Nacionalidad: EE.UU.

Estamos, en mi opinión, ante el mejor filme de Michael Mann ("El dilema" -1999-, "Alí" -2001-, "Collateral" -2004-), éste que narra las andanzas de John Dillinger, el mítico atracador de bancos en los años 30 de la depresión económica estadounidense. El director apuesta por tomar la cámara en mano con el fin de dar mayor verosimilitud a la narración, a pesar del feísmo que a veces pueda conllevar. Y lo consigue, consigue introducirnos en la historia, que es contada con pulso firme, destacando especialmente las escenas de acción y tiroteos, aunque con escasa emoción salvo la trama del protagonista (excelente Johnny Depp) con su novia (muy bien Marion Cotillard). Por el lado de los policías destaca, como siempre, un Christian Bale acertadamente comedido. Con todo, lo más atractivo de "Enemigos públicos" es ese enfrentamiento entre ambos bandos, donde, sin establecer juicios morales previos, encontramos motivaciones tanto razonables como injustificadas en los hombres del FBI y en la banda de atracadores. Cinelandia. Habría que preguntarle a Michael Mann si cree que ha aportado algo nuevo al rodar con cámara digital y en continuo movimiento, abusando de planos encimistas, una historia de gangsters de corte clásico ambientada en la Gran Depresión estadounidense. Para mi gusto, incomodidad en el visionado al tiempo que oculta tras la técnica y sus alardes cierta endeblez o inconsistencia, para redondear un relato que podría haberse exprimido hasta el final. Será que me estoy volviendo purista (además de mayor, claro)... El caso es que demuestra habilidad para que te intereses por lo que acontece en la pantalla, los personajes gracias a la profesionalidad del reparto son reconocibles y la violencia de los tiroteos te mantiene entretenido, pero en ningún momento pude evitar pensar: "¿por qué no profundiza en las motivaciones de los personajes?, ¿dónde está la empatía que generaba entre el pueblo el archifamoso John Dillinger?, ¿qué se oculta tras la dureza del agente federal Melvin Purvis?, etc., etc... En definitiva, una ocasión desaprovechada para haber completado un excelente filme. Álex.