El demonio bajo la piel (The Killer Inside Me)
Director: Michael Winterbottom. Guión: Michael Winterbottom, Robert D. Weinbach, sobre el libro "El asesino dentro de mí", de Jim Thompson. Intérpretes: Casey Affleck, Jessica Alba, Kate Hudson, Bill Pullman, Ned Beatty, Elias Koteas, Simon Baker. Duración: 110 m. Año: 2009. Producción: EE.UU. y Reino Unido.


Uno no sabe nunca qué esperar del británico Michael Winterbottom, lo mismo te hace un western, que un musical punk, que se mete en la ciencia-ficción o entra de lleno en la problemática situación social y política en Oriente Medio... Que alcanza notables cimas de calidad o que se hunde en lo más fallido... Y, ahora, llega la adaptación de la negrísima novela de Jim Thompson, "El asesino dentro de mí", situada en el profundo Estados Unidos y llena de violencia a duras penas contenida. Por cierto, no entiendo cómo en una película que dice ser fiel a su referente literario se cambia el título en el doblaje al español. En fin, el caso es que la historia del ayudante del sheriff (excelente Casey Affleck) aparentemente íntegro y amable que va destapando progresivamente sus oscuros impulsos interiores es contada con buena mano por Winterbottom, que trata en todo momento de resaltar la idea de la existencia del mal en sí mismo y la capacidad de persuasión de éste incluso sobre los que lo sufren, aun a costa de mostrar escenas de terrible violencia explícita. Sólo un final bastante por debajo del nivel del resto del filme le resta mayor interés, pero, por lo demás, vamos a considerar "El demonio bajo la piel" entre lo mejor del prolífico y versátil director.
Cinelandia.
Pocos calificativos nos quedarán en Cinelandia para definir a Michael Winterbottom dado el intenso seguimiento que hemos realizado de su prolífica filmografía; en mi caso me gusta creer que es tan ecléctico y versátil como errático, lo cual no sé muy bien en qué lugar le deja. El caso es que este filme que tanta polémica ha generado, a mi modesto entender no exenta de gratuidad en cuanto a que no veo ilícito moralmente hablando el mostrar violencia explícita (otra cosa más discutible es el perfil de los personajes femeninos, sumisos a los malos tratos y aun así enamorados del asesino y maltratador, que en los tiempos que corren es normal que puedan repeler hasta el punto de apuntar al director como sospechoso de misoginia), me ha dejado un buen sabor de boca en términos generales. Y es que, si bien por momentos es confuso en su estructura y ambiguo en la construcción de personajes, apuesta por la existencia de la maldad endógena porque sí en el ser humano, sin circunstancias externas que la generen (creo que en contra de la novela en la que está basado, donde el psicópata había sido victima de abusos por parte de su padre), algo que siempre me ha parecido interesante. Todo ello dentro de una trama de cine "noir" bien llevada, impecable en su estética cincuentera, correctamente interpretada por todo el reparto y ridículamente finalizada con una escena absurda a todas luces evitable. Lo dicho, Winterbottom en estado puro...

Álex.