Control (Control)
Director: Anton Corbijn. Guión: Matt Greenhalgh, sobre la autobiografía de Deborah Curtis.  Intérpretes: Samantha Morton, Sam Riley, Alexandra Maria Lara, Joe Anderson, James Anthony Pearson. Duración: 121 m. Año: 2007. Nacionalidad: Reino Unido.


El afamado director de videoclips (especialmente para Depeche Mode y U2, entre otras bandas), Anton Corbijn, narra la (corta) vida de Ian Curtis haciendo hincapié, lógicamente, en su faceta musical como líder de Joy Division, si bien muestra además sus relaciones más personales, sobre todo, con su mujer y su amante. De hecho, se basa en el libro autobiográfico escrito  por la consorte, lo que puede dar una visión un tanto sesgada en ciertos aspectos. Pero, más allá de esto, la película funciona estupendamente por ambientación, atmósfera, música y recreación de este curioso personaje, uno de los referentes del sonido post-punk británico.
Cinelandia.
Más que interesante cinta sobre el particular proceso autodestructivo que llevó en 1980 al suicidio a Ian Curtis, líder de la banda británica Joy Division. La historia está por encima de la banda sonora o, mejor dicho, esta última está encajada en la anterior y no es en sí misma lo importante del filme. Rodada en blanco y negro, lo cual es un acierto ya que potencia el tono dramático de la historia, presenta a un Curtis sensible y talentoso que se autopresiona por el conflicto de amar a dos mujeres (una de ellas su esposa), los ataques de epilepsia que sufre y contra los cuales no se cuida lo suficiente y el peso de no defraudar al público cuando éste realmente les estaba empezando a encumbrar. Lo dicho, recomendable para cualquiera y no sólo para los seguidores del grupo (de hecho, lo peor de la película no es culpa de ella, son las letras tan oscuras que se gastaba el amigo Ian).

Álex.