La contadora de películas Dirección: Lone Scherfig. Guión: Isabel Coixet, Rafa Russo y Walter Salles, sobre la novela autobiográfica de Hernán Rivera Letelier. Intérpretes: Bérénice Bejo, Daniel Brühl, Antonio de la Torre, Max Salgado, Geraldine Neary, Ariel Mateluna, Luis Dubó, Sara Becker, Mario Horton, Alondra Valenzuela, Francisco Díaz, Pablo Schwarz. Duración: 116 m. Año: 2023. Producción: España, Francia y Chile.

La dura vida de una familia humilde que trabaja para una empresa minera en un poblado del desierto chileno de Atacama en los años 60 y 70 es narrado con un fondo dramático y unas formas suaves y con un agradecible poso de optimismo dentro de la negrura de su situación. Además, el mensaje se refuerza con su conexión cinéfila: la pobreza es tal que solo un miembro de la familia puede ir al cine y luego contar al resto las películas que ve, hasta convertirlo en un pequeño espectáculo para muchos de los habitantes. Este poder sanador del cine, de la ficción, frente a las penurias de la vida, de la realidad, es sin duda el mayor valor de un filme que, por lo demás, parece pasar un poco de puntillas sobre los aspectos más turbios, tanto personales como sociales y políticos. Cinelandia. Aunque estoy convencido de que el resultado es más buenista que bueno, la directora Lone Scherfig se las apaña para mantener un frágil equilibrio entre el dramatismo del relato, tal es la cantidad de desgracias que le ocurren a la protagonista, y su permanente tono vital optimista y esperanzado. Si a eso le sumas el sentido homenaje a ese muerto ya tantas veces (en esta ocasión por mor de la llegada de la televisión) que es es el propio cine como elemento evasivo (y sustitutivo) de la cruda realidad y su vertiente social y política como denuncia de la permanente lucha de clases y la llegada al poder de Pinochet en el Chile de aquellos años, la balanza se inclina positivamente... Álex.